Este viernes, Irán lanzó decenas de misiles balísticos hacia Israel en una contundente represalia por los ataques aéreos israelíes del jueves, que resultaron en la muerte de varios ciudadanos iraníes, incluidos científicos y altos mandos militares. La escalada en las tensiones entre ambos países se intensifica, generando preocupación en la comunidad internacional.
Según informes preliminares desde Israel, se han registrado daños materiales significativos y al menos siete personas heridas de gravedad leve. Las autoridades israelíes han instado a la población a resguardarse en refugios mientras se llevan a cabo las labores de defensa y se coordinan las intervenciones de emergencia.
Este ataque subraya las frágiles relaciones en la región y plantea interrogantes sobre las implicaciones de un conflicto más amplio. Los líderes de ambos países han mantenido posturas firmes, y la comunidad internacional observa con cautela esta escalada de violencia.
Se espera que las próximas horas y días sean cruciales para la estabilidad en el Medio Oriente, mientras ambos gobiernos evalúan sus respuestas y preparativos ante un posible aumento en las hostilidades.
