En un sorprendente desarrollo en la saga del narcotráfico, al menos 17 familiares de Joaquín “El Chapo” Guzmán, entre ellos un nieto, una hija, varios sobrinos y su exesposa Griselda López Pérez —madre de Ovidio Guzmán López—, se entregaron voluntariamente a las autoridades de Estados Unidos.
De acuerdo con medios nacionales, el grupo cruzó a territorio estadounidense el pasado viernes al mediodía, utilizando el puerto fronterizo de San Ysidro, en Tijuana. Al llegar, fueron recibidos por agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI), que ya se encuentran investigando los vínculos y actividades de los familiares del famoso narcotraficante.
Hasta el momento, las autoridades mexicanas no han emitido una confirmación oficial sobre el suceso, lo que ha generado especulaciones en torno a las posibles implicaciones legales y personales que podrían enfrentar estos individuos.
Este acontecimiento marca un hito significativo en la historia de la familia Guzmán, que ha estado en el centro de la atención mediática y judicial durante años debido a las actividades delictivas de “El Chapo”, quien cumple una condena de cadena perpetua en Estados Unidos.
Con el entorno en constante evolución, se espera que este movimiento de la familia tenga repercusiones tanto en el ámbito legal como en el contexto social de México y Estados Unidos, donde la lucha contra el narcotráfico continúa siendo un tema candente. Las autoridades seguirán de cerca el desarrollo de este caso mientras se esclarecen las razones detrás de esta entrega voluntaria.