Un miércoles para el olvido se registró el 7 de mayo en el estado de Tabasco, donde más de seis ejecuciones marcaron un día de violencia extrema. La jornada comenzó con el hallazgo de un cuerpo sin vida en la prolongación 5 de mayo, en el municipio de Paraíso, donde fue ejecutado un hombre en circunstancias aún no esclarecidas.
La violencia continuó en Jalpa de Méndez, donde una mujer de 35 años también fue víctima de un crimen brutal. La situación se tornó más alarmante en Villahermosa, donde, en la tarde, dos personas fueron asesinadas a balazos en la Colonia La Manga III.
La tarde-noche se tornó aún más trágica con el hallazgo de otro cadáver en la Ranchería Río Tinto 3ra Sección, en el municipio del Centro. La violencia no cesó, ya que en la carretera Villahermosa a Boca de Limón, se descubrió una nevera abandonada que contenía una cabeza en su interior, en la ranchería Río Viejo 2da sección.
Los actos de violencia se incrementaron en la ranchería Chiquiguao 1ra sección del municipio del Centro, donde una pareja fue ejecutada a balazos y abandonada en la zona, sumando así una serie de crímenes que deja a la comunidad en un estado de consternación y miedo.
El día culminó con un alarmante panorama de inseguridad en Tabasco, donde la violencia parece no tener fin y la población se pregunta hasta cuándo continuará esta racha de ejecuciones.
